San Mamés huele a fútbol desde que abre sus puertas casi centenarias. Allí contemplé in situ partidos épicos y arrebatadores en los años gloriosos de la Quinta del Buitre, donde el aliento de las gradas rugiendo cuando el Athletic atacaba en tromba te ponía la carne de gallina. Pero el Madrid, un equipo encastado que siempre se creció en los ambientes fuertes, se siente en San Mamés como pez en el agua. Aquí aplaudieron con admiración a Juanito tras una exhibición antológica del genio malagueño, y no olvido otra ovación sonora a Stielike tras un gol facturado con una volea desde veinte metros. San Mamés aprieta, pero no ahoga. Aquí lleva el Madrid cinco victorias consecutivas. Incluso, el año pasado Huntelaar pareció Van Basten bajo la lluvia de La Catedral

Por eso el duelo de esta noche promete. Cristiano contra los leones, personificados en Fernando Llorente, un nueve de espléndida estampa que firmó sus primeros goles en su pueblo riojano de Rincón de Soto. Cristiano va a gozar en este partido porque el ambiente de San Mamés es de Premier. De hecho, aquí jugó Inglaterra en el Mundial de España 82. Armani Ronaldo se gusta en estos escenarios calientes, donde el fútbol se vive con una pasión contagiosa. También será un partido que medirá la adaptación creciente de Benzema. Karim, se acabó la terapia. Grita but (gol) de una vez