Jesualdo, Juanmi y Portillo

Jesualdo, Juanmi y Portillo

La estadía del Málaga en Bad Kreuznach ha servido para muchas cosas. En primer lugar, para que los jugadores vayan asimilando la propuesta 4-3-3 de Jesualdo Ferreira, y también para que los periodistas y los aficionados en general conozcan un poco más al nuevo entrenador del Málaga. Sabemos un poquito más sobre cómo piensa, trabaja y acerca de su carácter en el banquillo. Pero también se pueden sacar, si no conclusiones, sí, al menos, primeras pinceladas que nos desvelarán hasta dónde puede llegar este nuevo Málaga. Todos los jugadores han trabajado de forma sobresaliente, pero la matemática pura y dura indica que si vienen tres fichajes, habría un excedente en la plantilla de tres, a los que habría que buscar equipo o tratar de colocar siempre en las mejores condiciones para todas las partes. Tarea poco sencilla. Junto con la segunda juventud de Arnau, que ha sorprendido a los técnicos, he podido ver a Ferreira muy conforme con los jóvenes Juanmi y Portillo. Ha visto a Jona y ha tenido a Sandro Silva, pero no podemos valorar a este equipo por su actuación de anteayer ante el Wehen Wiesbaden. Era un entrenamiento con público.

Allí no estaban Duda, Hélder, Apoño, Baha, Rondón, Papelito e Iván González. Tampoco debutó Galatto, ni los tres posibles fichajes si es que vienen. Con todos estos jugadores que hemos nombrado en estado de gracia, el Málaga tiene muy buena pinta. La de un equipo competitivo que propone un fútbol con buen trato de balón. Y así, nos podemos divertir.