Ha dado el puñetazo en la mesa que esperábamos

Ha dado el puñetazo en la mesa que esperábamos

Ozil ha dado el paso definitivo para fichar por el Madrid. El talentoso turco-alemán ha sido prudente hasta que los responsables del Werder Bremen agotaron su paciencia. Cuando la estrella de la selección alemana le dijo el jueves a nuestro compañero Guerrero que no le dejaban hablar del Madrid, estaba respetando al club que todavía le paga y la palabra que le había dado el presidente del Werder, que le negaba que hubiera una oferta formal por él. Por eso, cuando Valdano anunció durante el partido contra el Bayern que el Werder había rechazado una oferta formal por Ozil, el chaval se vio liberado para gritar a los cuatro vientos lo que todos ya sabíamos. Quiere jugar en el Bernabéu sí o sí. Esto va a obligar a los teutones a negociar antes del partido de Champions con la Sampdoria una salida inteligente para las partes. Cobrar 15 millones por un futbolista que queda libre en junio de 2011 es lo más coherente. De lo contrario la cabezonería alemana que ya tuvo el Bayern con Ballack (se fue gratis al Chelsea con tal de no negociar con Abramovich) vivirá un segundo capítulo.

Ozil ha tomado el camino que ya cogieron en su momento Ronaldo o Zidane para jugar en el Madrid. Su declaración pública de amor hacia los blancos no admite dudas. No hay ambigüedades. Él sabe que ésta es una gran oportunidad en su carrera y no la quiere desaprovechar. Además, vio el viernes al Madrid en Múnich y es consciente de que el equipo de Mourinho le necesita como el comer. Este equipo tiene buenos recuperadores y grandes delanteros, pero falta un cerebro, un Guti. Y ése es Ozil.