Fue un Milán de andar por casa

Fue un Milán de andar por casa

Incapaz de recuperar la pelota cuando la tenía el Madrid, con Ronaldinho deambulando por el campo, mal atrás, los italianos pudieron recibir un castigo mucho mayor, pero aún así salieron del Bernabéu tocados. Quizá no hundidos del todo, pero un análisis profundo dejó claro que un partido de ritmo alto les destroza. En parte por la edad de jugadores clave como Pirlo, Seedorf y Ronaldinho, también por la apatía de alguno de ellos, no todos. Sí Ronaldinho y también Ibrahimovic. Un Milán de andar por casa, y nunca mejor dicho. En Italia le respetan, le esperan atrás, le dan la pelota, le dejan dominar. Quien hizo eso perdió, como el Parma. Y, además, permitió a los rossoneri gustarse, a Pirlo mover la pelota y destapar su talento. Eso no lo perderá nunca. Pero en cuanto el rival aprieta, se acaba todo.

No hay duda, y será difícil que Allegri pueda lograr los objetivos. Cambió el esquema para darle más peso en el juego a Ronaldinho, pero, en realidad, la única opción razonable es dar la titularidad Boateng. Con él como titular al lado de Pirlo, sí mejoraría el equipo, y también podría entrar Abate. Con un Milán tan blando poco podrá hacer en Europa. Y quizá tampoco en Italia. Anoche quedó claro. Pato sufre, se marchita en un equipo incapaz de llevarle un solo balón en condiciones, salvo que el rival ayude. El Madrid lo hizo en un tramo del primer tiempo, con el 2-0. Y el Milán pareció algo. Luego todo se acabó. En partidos así dependen del rival. Es así de duro.