El 7 de julio, un problema para el club

El 7 de julio, un problema para el club

García Macua utilizó la estrategia de retrasar al máximo las elecciones para disponer del comodín de Caparrós y desgastar a Urrutia en la búsqueda de un técnico de prestigio. Y ahora, lo que le queda e inquieta es un acuerdo verbal con un preparador que ha intentado su fichaje por el Sevilla y el Atlético de momento sin suerte, y los problemas reales de acudir al mercado como candidato, sin la seguridad de un presidente. Queriendo o no, se ha metido en idéntico o mayor lío. Por ejemplo, ayer se perdió la opción de contratar a Deschamps, que seguirá en Marsella. Fichar a un gran entrenador para el Athletic, con la plantilla actual, la participación en Europa, el respaldo social y lo que se paga de ficha en Ibaigane no tiene mayor misterio.

Heynckes y Luis Fernández dieron el sí en su día con éxitos recientes en su cartera y un caché importante. El alemán había ganado cuatro títulos con el Bayern (dos Bundesligas) y el tarifeño se acababa de proclamar campeón de la Recopa con el PSG. Incluso Lertxundi presentó a Hiddink como una apuesta electoral fallida... Había pegada, pero en otras fechas, claro. Su contienda con Arrate fue un mes antes que en estos comicios: un 8 de junio. Y Hiddink se reenganchó como seleccionador de Holanda. Con todo esto, el que sale perdiendo es el Athletic. Alguno estará deseando oírlo para frotarse las manos, pero quizás debiera triunfar quien se presente sin un entrenador y prometa negociar ya como presidente con un técnico de garantías.