La realidad y Bob Marley

La realidad y Bob Marley

Debió de ser una tarde de playa, al ponerse el sol, tras acabar una de aquellas idílicas pachangas donde nadie perdía nunca, cuando Bob Marley, a quien el fútbol le inspiraba más que algunas hierbas, decidió sentar cátedra: "Lo rastafari no es una cultura, es una realidad". Drenthe, futbolista del Real Madrid (no se olvide: alguien lo fichó), ha ido cumpliendo a rajatabla con el maestro del reggae, desde que la liaba en los juveniles del Feyenoord (salió al Excelsior, luego le repescaron) hasta que apuntaló el petardazo del Hércules: él es así, y punto.

Quién sabe dónde estaría ahora este gladiador armado hasta los dientes como en las primeras rondas de las pelis de romanos de no haber enamorado Marcelo a Mourinho. El entrenador más arteramente acusado de ser defensivo de la historia es el único (Schuster, Juande y Pellegrini tragaron) que pensó que el holandés no valía para su banda izquierda. Lo seguirá pensando aunque Drenthe haya vuelto renegando de su realidad. Ha cambiado, dice. ¿Ataque de cultura? Mejor: buenos consejos.