2020: esta vez pueden ser

2020: esta vez pueden ser

Comienza la carrera hacia los Juegos Olímpicos de 2020. Con sólo seis ciudades. La menor cifra de las últimas cinco convocatorias. Para los Juegos de 2016 hubo siete ciudades aspirantes, nueve para los de 2012, diez para los de 2008 y once para los de 2004. Por eso, la incorporación a última hora de Doha y Bakú parece forzada, y vaya usted a saber si propiciada desde el propio Comité Olímpico Internacional (COI) para disimular el desinterés creciente de las ciudades a ser aspirantes. Puede que sea por la crisis, pero también por el desencanto de algunas candidatas, como Madrid, de ver cómo los Juegos se conceden por criterios difíciles de entender. Londres era una candidatura virtual para el 12, y Río era la peor para el 16.

Pese a ello, Madrid ha vuelto a presentarse. Ha hecho bien. Objetivamente, sólo tiene dos rivales: Roma y Tokio. Por tanto, hay partido. Un partido en el que han de intervenir factores a su favor. Sobre uno de ellos damos cuenta en esta edición: es la candidatura de Tarragona a los Juegos Mediterráneos de 2017, que cuenta con la simpatía de la mayoría de los miembros del COI con voz y voto en el asunto. Que la marca España siga teniendo un gran peso en el deporte es importante para los intereses de Madrid 20. Como lo fueron las imágenes de la ciudad convertida en capital del mundo durante la visita papal, con 300.000 jóvenes ondeando banderas de prácticamente todos los países, un aval que utilizado con precaución va a sumar más que restar.