El no-debate camino de Barcelona

El no-debate camino de Barcelona

Ha habido algún amago de debate estos días en el Sevilla sobre el once que debe alinear Marcelino en el Camp Nou. El asturiano lo atajó antes incluso de que se iniciase. "En Barcelona pondremos lo mejor para ganar". Aun así, ha habido estertores de discusión sobre la idoneidad de alinear un equipo suplente con mayúsculas. Marcelino no lo va a hacer. Lo contrario sería una pena. No honraría la competición y admitiría una inferioridad que lógicamente existe pero que no tiene por qué hacerse grosera. Dar el partido por perdido no es deportista. El Sevilla va a jugar entre otros con Fernando Navarro, Medel, Escudé, Rakitic, Cáceres, Trochowski, Kanouté, Navas y tal vez Negredo. Hay campeones del mundo, simples mundialistas, campeones de Eurocopa, ganadores de Copa América, leyendas de África. Se sentencia con demasiada ligereza. Es cierto que el Sevilla no tiene muchas posibilidades en la casa del "campeonísimo", como la gusta hablar del Barça a Del Nido. Sería una indignidad es despreciar ese trocito de tarta.

No existe mejor entrenamiento posible que medir tus fuerzas con el Barça, intentar neutralizar todas sus escaramuzas de ataque, salir de su presión. Jugar contra los mejores. Nadie va a querer perdérselo, quién diablos va a renunciar a ese escenario. Se trata de disfrutar sufriendo. Y eso significa competir, no bajar los brazos. Eso ya ha pasado mucho en Barcelona. Sólo así se hace el ridículo. Cuando uno lo da todo, no está obligado a más.