Una mentira repetida mil veces...

Una mentira repetida mil veces...

Una mentira repetida mil veces no siempre se convierte en verdad. 27 años después de aquel partido contra el Rijeka aún seguimos intentando desmontar una historia que hasta el propio protagonista alimenta. Desnica es sordomudo de nacimiento. Fue expulsado por doble amonestación por pérdida de tiempo en aquel partido de la UEFA en el Bernabéu. Al mostrarle la segunda perdió los nervios y empezó a gesticular. Eso fue aprovechado por un locutor de radio que, desde su estudio, hizo el chiste de que un sordomudo fue expulsado por protestar. Ese personaje tenía tendencia a hacerse el gracioso con los defectos físicos de los demás...

Distinto es que en aquel choque el árbitro fue casero. Yo sí estaba en el Bernabéu y conservo mis notas. Dejó a los yugoslavos con ocho. Les pitó un penalti en contra en la primera expulsión. Dejó sin sanción las tarascadas de Chendo a Desnica, un extremo izquierdo habilidoso que en la ida ya fue una pesadilla. Vamos, que para remontar el 3-1 del Rijeka, el Madrid contó con favores arbitrales. Schoeters era el trencilla. Además de eso, el Madrid contó con el revulsivo en la segunda mitad de dos suplentes que luego serían la base de una década gloriosa: Sanchís y Butragueño. La grada reclamó la presencia del Buitre en el descanso. Para ambos fue una primera gran noche de remontada en el Bernabéu. Por desgracia, siempre será la noche de Desnica, el pobre sordomudo...