La clave del triunfo fue la valentía

La clave del triunfo fue la valentía

El Centenariazo es un recuerdo muy bonito, de los mejores que tengo como entrenador. Fue una gran satisfacción. El Real Madrid había solicitado la final en su campo para conmemorar su centenario y el resultado quizá fue una sorpresa, aunque no para nosotros. Preparamos el encuentro desde la creencia de que podíamos ganar. Recuerdo que no lo preparé de manera muy diferente a otros partidos. No creo que tuviéramos menos presión, pero había una sobremotivación en nuestros jugadores, porque a priori todas las circunstancias eran desfavorables. Apenas tuve que motivarlos, sólo hacerles ver que podíamos ganar al Madrid en el Santiago Bernabéu.

Salimos del vestuario con la idea clara de que teníamos que ir a por ellos desde el primer minuto. A tratar de jugar, a tratar de buscarles lo más arriba posible. Quizá eso fue lo que les sorprendió, no hay que olvidar que ese Madrid ganó la Copa de Europa a las dos semanas de perder con nosotros. Igual pensaron que íbamos a esperarles. Marcamos muy pronto, pero nunca dejamos de intentar jugar y marcar más. No temí por el resultado, estábamos convencidos. A pesar de la dimensión de la gesta, no hubo grandes alardes en la celebración. Fue todo muy modesto.