Se van a repartir el oro este año

Se van a repartir el oro este año

Son diferentes en todo, pero un eslabón les une: el espectáculo del gol. Desarrollan su talento apoyados en virtudes excepcionales, aunque sobre la hierba el 'modus operandi' les diferencia incluso en la manera de mirar el balón. Cristiano y Messi encarnan una poderosa lucha personal que divide al planeta fútbol. El portugués quema el césped por donde pisa; el argentino baila al enemigo con la bola pegada al pie. No hay datos ni goles que concedan el trono mundial a uno u otro sin mediar discusión. Es cuestión de gustos, de sensibilidad y emociones. Una tarde Cristiano arrolla y el foco le ilumina en su condición de vigente Bota de Oro. Pero al minuto Messi no se arruga, saca un conejo de la chistera y se reivindica como actual Balón de Oro.

Cristiano y Messi son los valores añadidos del Madrid y Barça para dispararse en la Liga BBVA, sin rival que les pueda hacer sombra. Curiosamente han pinchado los dos en la Champions. Y lo hicieron a la vez, para empatar también en esto. Un lunar en sus currículum, en una temporada que, sin embargo, les volverá a teñir de oro sí o sí en los grandes premios de final de año. El Balón de Oro y la Bota de Oro tendrán dueños en Cristiano y Messi, aunque hoy es demasiado pronto para adivinar el reparto.

El blanco le saca un cuerpo al azulgrana en la carrera por el Balón dorado, con el crédito del título de Liga; y el argentino aventaja en dos goles al portugués a dos jornadas de acabar el curso. La igualdad es el denominador global de dos fenómenos dispuestos a derribar barreras, uno con la zurda y otro con la derecha, uno con suave veneno y otro con metralla expansiva. No es fácil distinguir quién es el más espectacular de los dos, quién es el que cualquier entrenador querría para su equipo. 46 filigranas lleva la Pulga, contra 44 zarpazos inapelables de la Fiera. El espectáculo de la Liga no ha acabado. 180 minutos dan para mucho en sus botas.