Josep Guardiola i Sala

Josep Guardiola i Sala

Esencia del fútbol, pasión por el juego, entusiasmo por el color que nació con la infancia, memoria del equipo que condujo a la belleza y al triunfo. El aficionado más ilustre del Barça, el hombre que recreó la autoestima del club con el que soñó, este joven al que llevaron al Barça de Primera cuando era aun un adolescente, y que vino del frío de Tercera para convertirse en el mejor entrenador del mundo. Anoche le dijo adiós a todo esto, tras un partido simbólico en el que Messi convirtió su apellido en sustantivo de la historia universal del gol.

Como si el éxito fuera sólo un accidente, y en todo caso una gloria de "estos muchachos", Pep, Josep Guardiola i Sala, mostró su amor y su aplomo; generó un fútbol que nadie va a olvidar y que ahora nos acompaña como las leyendas que nos hicieron aficionados: Kubala, Cruyff, Ronaldinho, Messi, Pep. Pep per sempre. Un recogepelotas, un futbolista, un entrenador, un ser humano nos hizo más humano el fútbol. En ese abrazo final, tras el gol número cuatro de la noche, Messi le transmitió seguramente sus sentimientos, pero los que estábamos viendo sentimos que en ese abrazo cabíamos todos. Esencia inolvidable del fútbol. Gràcies, amic. I sort.