Anoche estrenaron en Canal Plus el documental sobre Ayrton Senna. No han podido elegir un mejor momento para hacerlo, justo en la semana del GP de Mónaco, el mismo que el brasileño ganó en nada menos que seis ocasiones. Ya había asistido al estreno de la película, pero no dejé de emocionarme al volver a verla y recordar ese carácter indómito de Magic. Un piloto de leyenda que disfrutaba como ningún otro en ese circuito único que es Montecarlo, el escenario soñado por los más grandes (y los que no lo son) para una victoria inolvidable.

Alonso milita en ese grupo de elegidos que saben lo que es recibir un beso de Carolina (o el apretón de manos de Alberto, a elegir según preferencias), lo ha logrado en dos ocasiones y ahora podría repetir una tercera escudería, después de hacerlo con Renault y McLaren. Es un desafío para el asturiano, especialmente porque este circuito es de los que le gustan, de los ideales para demostrar que el talento aún tiene sitio en esta F-1 de tecnología y aerodinámica. Senna lo sabía... y Fernando quiere confirmarlo.