La presencia de Florentino, junto a Pitina, en el Carranza resultó un mensaje de club demoledor. Él es el primero que entiende cómo el ADN madridista se ha transmitido históricamente en el Madrid de veteranos a noveles. El ascenso de jugadores al primer equipo genera identidad de club, es un mensaje de esperanza para los chicos que trabajan en Valdebebas y que sueñan con jugar en el primer equipo. La puerta del primer equipo tiene que estar abierta a jugadores como Carvajal, Casado, Jesé, Morata o Joselu. La cantera no puede ser una fábrica de rivales.

Di Stéfano preguntaría: " ¿Y a quién quitamos?". Pues, siendo grandes futbolistas, los Sahin, Altintop o Carvalho no pueden quitarle lugar a lo que debería ser política de club. El ascenso del Castilla refrenda el potencial de estos chavales, ávidos de gloria. El salto de categoría es importantísimo, pero que nadie olvide que la razón de ser de una cantera es nutrir al primer equipo.