Como Hinault y Perico en los años ochenta

Como Hinault y Perico en los años ochenta

Ya son muchos los que en estos días me han señalado las ediciones de 1983 y 1985 como candidatas alternativas a la mejor Vuelta a España de la historia. Eran los primeros años con televisión en directo, también los tiempos del Reynolds en el Tour Muchos nos enganchamos ahí al ciclismo. Aquellas dos rondas tuvieron un denominador común: Bernard Hinault y Perico Delgado desbancaron a Julián Gorospe y Robert Millar, respectivamente, en dos ataques lejanos en días inesperados, en Serranillos y en Navacerrada.

Ya tenemos la coincidencia principal con esta Vuelta 2012: la sorprendente ofensiva en Collado de Hoz de un gran campeón, Alberto Contador, y su coronación en Fuente Dé. Su sola presencia en la carrera ya aseguraba el espectáculo, porque no hay nadie en el pelotón actual que entienda el ciclismo con su valentía, su ambición y su inconformismo. Por si esto fuera poco, el madrileño ha chocado contra un ciclista que no solo resistía con solvencia sus martillazos, sino que además los devolvía a la menor ocasión. Purito Rodríguez, con todos los respetos, ha sido más rival que Gorospe o Millar en los ochenta. Si a eso unimos también a un dignísimo Valverde, segundo en Madrid pese a verse zarandeado por una caída. Y también un recorrido con gancho y televisivo... Entonces, por qué no, quizá sí estemos ante la mejor Vuelta de la historia.