Bahamontes se jubila con las bodas de oro de la Vuelta a Toledo

La llamada. Marco el número del móvil de Federico Martín Bahamontes. “Hola, soy Juan Gutiérrez, de AS, Guti... ¿Cómo lleva la Vuelta a Toledo? Ya queda poquito”, le comento. “Pues como siempre, muy liado... Pero llámame mejor a la oficina, que me quedo sin batería”, responde Fede, apurado. Anda con los últimos retoques de la carrera, que comienza este sábado con la primera de sus cuatro etapas, entre Ocaña y Consuegra. Luego visitará Guadamur, Villarrubia de Santiago y, al fin, la guinda en la Plaza de Zocodover de Toledo, el 11 de agosto. Ese día, Bahamontes, a sus 87 años, abandonará la organización.

La oficina. Marco el número de la oficina del Club Peña Bahamontes, donde Fede trabaja con su inseparable Faustino Suárez, que también se retira. Allí ha montado una exposición con parte de sus trofeos. La Vuelta a Toledo 2015 es una fecha especial, porque la carrera cumple 50 años. “¿Es cierto que lo deja después de estas bodas de oro?”, le pregunto. “Fijo que sí”, afirma. “Pues hay gente como López Cerrón que asegura que volverá, porque se va a aburrir”, insisto. “De eso nada. Hay mucho que hacer. Por ejemplo, colocar las fotos de mi archivo. No hay marcha atrás”. Lo tiene claro.

El Museo. Otro proyecto de Bahamontes es el traslado a Toledo de su Museo, actualmente en Seseña. Ya ha hablado con la alcaldesa, Milagros Tolón, que muestra buena sintonía. Bahamontes era amigo de su padre, con quien trabajaba en el mercado a finales de los 40. Cuando Fede empujaba una carretilla y no era aún el Fede campeón que ganó el Tour en 1959.

La primera. Bahamontes organizó la primera Vuelta a Toledo en 1966. Antes montaba competiciones de motocross. Aquella edición tenía 160.000 pesetas de presupuesto. La actual asciende a 16 millones (“siempre en pesetas, porque me aclaro mejor que en euros”, dice Fede). El historial lo estrenó Enrique Cifuentes, que este año ha sido invitado a la carrera. El siguiente certamen se lo adjudicó Agustín Tamames, luego vencedor de la Vuelta a España en 1975. En su palmarés también hay ganadores de etapa en el Tour, como José Luis Viejo o Juan Antonio Flecha, o de grandes clásicas, como Dani Moreno (Flecha Valona). Y también el actual presidente de la ACP, la asociación de los ciclistas españoles: José Luis de Santos. O el concejal Perdiguero.

Los Indurain. Otro ilustre que venció en Toledo fue Miguel Indurain. No se llevó la general, pero sí dos etapas. Su hijo, también de nombre Miguel, corrió el año pasado con el Caja Rural. Bahamontes ha invitado al quíntuple campeón del Tour a que le acompañe el día de su jubilación. Y ahí estará Miguel Indurain el 11 de agosto.