El bombazo en esta contrarreloj por equipos lo dio el Kelme. Nadie podía pensar que pudiera quedar a tan escasos segundos de la ONCE y el US Postal y que su rendimiento fuera incluso superior al del Telekom, gran derrotado del día.

Y lo mismo sucede con la ONCE. Nos hemos llevado una pequeña desilusión porque ya veíamos vestido de amarillo a Igor Galdeano. Pero el resultado de la crono es muy positivo, porque Beloki e Igor le han ganado el pulso a Armstrong y Ullrich, que, de momento, tienen que verles las espaldas a los españoles en la clasificación general.

Un detalle que me ha gustado es que el equipo de Armstrong haya esperado a Heras cuando se cayó con Vandevelde. Un candidato al Tour no se suele parar, pero ha preferido sacrificar veinte o treinta segundos de perdida para tener a Heras bien situado. En caso contrario éste habría perdido unos tres minutos. Esto quiere decir que a Roberto no sólo le tienen para tirar del carro y que piensan utilizarlo en las etapas de montaña, quizá como marcador para las escapadas.